“Nuestro proyecto educativo lleva a cabo una serie de controles propios al margen de las evaluaciones habituales”, explica María Egea Romero, directora del colegio Santa María. Además, la dirección era consciente de que uno de los principales problemas de algunos alumnos radicaba en la falta de atención en clase, “y eso nos preocupaba”. Gracias a los mandos el grado de atención vuelve a ser elevadísimo. Hasta los niños más despistados se esfuerzan por estar atentos y en participar en clase”, confiesa Egea.
En todos ciclos
Los mandos comenzaron a utilizarse inicialmente, y a modo de prueba, en un concurso entre los colegios Santa María y Buen Pastor, ambos pertenecientes a los mismos propietarios. En este concurso se evaluaba el nivel en distintas materias de 5º y 6º de primaria, así como de 1º y 2º de la ESO. Actualmente, el colegio Santa María está utilizando los mandos en todos los ciclos de enseñanza, con especial incidencia en las asignaturas de ciencias naturales, ciencias sociales, lengua e inglés. “Vamos a diseñar una programación para poder utilizar los mandos en buena parte de las asignaturas de la manera más adecuada y útil para los alumnos“, asegura Egea.
De momento el colegio Santa María cuenta con 25 mandos interactivos, pero el objetivo es que en un futuro, cada ciclo de enseñanza que se imparte en el centro cuente con su propio kit. Tanto la acogida de los alumnos como de los profesores ha sido muy positiva. Según Egea, para los alumnos constituye una herramienta muy innovadora que les llama poderosamente la atención y que les permite estar mucho más concentrados y atentos en el aula. Para los profesores, los mandos son de gran ayuda, porque les facilita saber si los alumnos comprenden las explicaciones que se dan y, en caso de ser necesario, volver a incidir sobre lo expuesto.
La directora del colegio Santa María destaca como principal ventaja del sistema PowerVote el hecho de que cada vez que el profesor quiere verificar el nivel de conocimiento de los alumnos, o comprobar si éstos han comprendido la explicación sobre una determinada materia, puede formular una serie de preguntas con distintas opciones de respuesta. A través de un mando, los alumnos eligen la que consideran correcta, lo que le permite al profesor confirmar si han entendido bien los conceptos explicados en clase, matiza Egea.
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